¿Cuáles son los mitos y realidades detrás de las promociones?

Es un hecho que se espera un aumento en las ventas de la marca cuando se lleva a cabo una campaña o actividad promocional, con efectos positivos para el shopper y/o consumidor; adicionalmente es un generador de empleos, sin embargo, cuando se aterriza a nivel punto de venta hay que tener mucho cuidado, porque se convierte en un arma de doble filo para la marca, por ello, pongo a consideración algunos mitos que debemos de tener presentes al momento de llevar a cabo una promoción.

1.-Descuento constante en un producto se convierte en precio.

Una promoción dirigida a ofertar el precio de un producto, debe de ser de manera muy puntual, con un periodo perfectamente definido, cuando el precio del producto se ve constantemente ofertado, se vuelve un punto muy sensible para el consumidor, de tal forma que el producto perderá su atractividad cuando se encuentre en el precio regular.

2.-Promociones 3 x 2, o 2 x1 

Cuando se presentan promociones agresivas con producto de obsequio, se corre el riesgo de que el consumidor o shopper hipoteque el abasto del producto; suelen ser muy efectivas para categorías de consumo por expansión, en las que entre más producto tengas a tu alcance, más consumes; como botanas, galletas, refrescos, etc; a diferencia de otras categorías como papel de baño o limpiadores, no por tener más producto significa que “vayas al baño o limpies tu casa” con mayor frecuencia.

3.-La implementación de la promoción.

Se dice que es mejor una mala idea bien implementada, que una buena idea mal implementada; si la marca no se asegura de tener todos los elementos perfectamente bien planeados y controlados, se corre el terrible riesgo de hacer sentir defraudado al consumidor o shopper, lo agravante es que ese consumidor o shopper, no regresará a tu marca.

4.-Comprar con promoción a meses sin intereses no tiene costo cero.  

Aun cuando las tiendas tengan anunciada una promoción sin un cargo por financiamiento, habría de revisarse el nivel de precios, pues podrían inflarlos para añadir un interés implícito. Una solución es comparar en varios lugares.